“Amar al prójimo no es una opción, es un mandato” (cf. Jn 13,34)

Cáritas es el rostro visible de la caridad de la Iglesia. En nuestra parroquia, Cáritas Parroquial acompaña a las personas y familias en situación de necesidad, escucha con cercanía, ayuda con dignidad y siembra esperanza.

El amor verdadero se traduce en gestos concretos. No es teoría, es pan compartido, consuelo ofrecido, puertas abiertas.

Cáritas somos todos. Gracias por ayudar a que nadie quede fuera.